SEGUROS | 04.09.2025
Seguro de caución: doble garantía para ti y tus clientes
Cuando un proyecto depende de factores fuera de tu control, la incertidumbre no es una opción. Crisis, cambios legales, tensiones comerciales… La realidad actual exige no solo cumplir, sino también demostrar que puedes hacerlo sin riesgos para nadie. En este escenario, el seguro de caución se ha convertido en una solución eficaz para aportar estabilidad, generar confianza y facilitar el desarrollo de cualquier actividad empresarial.
Las reglas del juego cambian rápidamente y factores que antes parecían lejanos —como una tensión geopolítica o una modificación normativa— hoy pueden tener un impacto directo sobre la marcha de un proyecto o el cumplimiento de un contrato.
Según el Banco de Pagos Internacionales (BPI), estamos atravesando un «momento clave» a nivel económico, marcado por la fragilidad financiera, la volatilidad de las políticas públicas y el resurgir de tendencias proteccionistas. A su vez, la UNCTAD proyecta un crecimiento mundial del 2,3 % en 2025, colocando a la economía mundial en una trayectoria recesiva. A esto se suma un nivel de incertidumbre política y comercial que no se veía desde hace décadas.
En la práctica, este contexto se traduce en proyectos congelados, contratos revisados y decisiones estratégicas postergadas. Cuando la confianza se debilita, cada paso empresarial se vuelve más incierto. Por eso, contar con garantías firmes no es solo recomendable, sino imprescindible. El seguro de caución aporta una capa adicional de seguridad: respalda el cumplimiento y transmite solidez desde el primer momento. Como destacan desde Solunion —la joint venture especializada que MAPFRE comparte con Allianz Trade, con rating A+ de S&P—, «este instrumento nos permite ofrecer cobertura en operaciones complejas y emitir garantías en más de 55 países».
¿Qué es exactamente un seguro de caución?
El seguro de caución es una póliza a través de la cual una aseguradora garantiza a un tercero (beneficiario) que el tomador de la póliza (es decir, su cliente) cumplirá una obligación previamente pactada.
Se trata de un mecanismo ampliamente aceptado por administraciones públicas y empresas privadas, y tiene aplicación en múltiples ámbitos: licitaciones, contratos de obra, suministro, alquileres, obligaciones fiscales o aduaneras, entre otros.
Como comentábamos, en esta relación intervienen tres figuras:
- El tomador, que asume una obligación (como ejecutar una obra o prestar un servicio).
- La aseguradora, que actúa como garante del cumplimiento.
- El beneficiario, que recibe la compensación si se produce un incumplimiento.
A diferencia de otros seguros, aquí no se cubre una pérdida directa del tomador, sino que se garantiza su conducta contractual. Por eso, no es una póliza de indemnización, sino una fórmula de garantía de cumplimiento que refuerza la confianza.
Un recurso que construye reputación
El valor del seguro de caución va mucho más allá de su función técnica. Para el beneficiario, supone la tranquilidad de saber que, si algo falla, una aseguradora solvente responderá. Para la empresa que lo contrata, es una forma tangible de demostrar responsabilidad y compromiso.
Esta garantía bidireccional ayuda a generar entornos comerciales más seguros, a reducir barreras de entrada a nuevos mercados y a consolidar relaciones basadas en la confianza. Especialmente útil en un contexto de incertidumbre generalizada, este tipo de póliza proyecta una imagen empresarial seria, preparada y competitiva.
Además, no solo hace posible acceder a proyectos locales o públicos. «Hay ocasiones en las que las empresas han buscado soluciones en mercados exteriores y les ha resultado difícil obtener la póliza local, pero al hacerlo a través de Solunion han conseguido respaldo sin dificultades», explican desde esta entidad.
Más allá de las grandes infraestructuras
Aunque tradicionalmente ha estado ligado a grandes obras públicas, el uso del seguro de caución se ha democratizado. Pymes, autónomos, startups tecnológicas o exportadoras lo emplean para licitaciones locales, contratos privados, arrendamientos o compromisos aduaneros. Su versatilidad y adaptación a sectores muy distintos lo han convertido en un recurso habitual también para empresas de menor tamaño.
Desde Solunion recalcan la posibilidad de ofrecer soluciones integradas a medida, aprovechando las sinergias con sus accionistas. «Podemos poner a disposición del cliente una combinación de productos que sume valor, haciendo cross-selling entre distintos ramos», explica Juan José Montes, director corporativo de caución. «Por ejemplo, a una empresa constructora podemos ofrecerle un pack completo con una póliza de caución de Solunion más un seguro de RC y otro de daños de MAPFRE».
Más flexible que un aval bancario
Una de las grandes ventajas del seguro de caución frente a otras fórmulas es su menor impacto financiero. «A diferencia de los avales bancarios, permite liberar recursos a las empresas: no computa como un riesgo, como los contemplados en la CIRBE», subrayan desde Solunion. Esto supone un alivio importante para muchas compañías que necesitan preservar esta capacidad para otras inversiones.
Además, junto a la sencillez de contratación, la rapidez en la emisión y la dimensión internacional que tiene Solunion «nuestra capacidad de respuesta, en menos de 24 horas, es un valor muy apreciado por las compañías que necesitan agilidad en la solicitud de garantías», añade Rocío Tello, directora de caución de Solunion España.
Además, la cobertura no tiene costes de mantenimiento, a diferencia de los avales bancarios. «Siempre se cobra por lo que se consume, extornando la prima prorrateada por días», explican. Y no se exigen garantías pignoraticias ni personales de los socios, solo las propias de la empresa o su matriz.
Confianza para crecer
En definitiva, el seguro de caución, además de proteger, impulsa. Las empresas que pueden acreditar su compromiso y solvencia con garantías eficientes están en mejor posición para negociar, crecer y competir.
MAPFRE, a través de Solunion, comercializa este tipo de seguros en España y Latinoamérica, ofreciendo cobertura a empresas de todos los tamaños.
Sea cual sea tu sector o tu próxima meta, esta garantía puede marcar la diferencia entre quedarte al margen o dar el paso hacia tu próximo gran proyecto.
ARTÍCULOS RELACIONADOS: